Foto tomada del Movimiento 18 de Diciembre. modificada por Revista Hekatombe
Los sucesos presentados el 18 de diciembre del 2013 en la ciudad de Bogotá llevaron a reafirmar a los movimientos políticos, populares y sociales el hecho de que la paz en Colombia no es un asunto de negociación, mucho menos que el desarme es el acto que conlleva a tal anhelo, por el contrario reforzó la idea que la única vía posible de hablar de paz es a través del trabajo organizado, construyendo alternativas desde nuestros territorios bien sean barrios, veredas, comunas, corregimientos, zonas de reserva campesinas, resguardos indígenas, consejos comunitarios donde habitamos aquellos que nos reconocemos ya sea como explotados, subordinados, subalternos, acallados, clase obrera o el término que quieran usar.
En la VII conferencia de la CLACSO el expresidente de Uruguay Pepe Mujica afirmó en su discurso que:
“la paz no es de izquierda, no es de derecha, no es de centro, es de la convivencia humana… que por todas partes uno ve gente que construye solidaridad y que pone parte de su vida al servicio de la causa de los demás, y aquí hay una cosa central, si la vida es hermosa es doblemente hermosa cuando la vida no se traiciona a sí mismo, cuando vos muchachito de 18-20 años que está soñando en esa multitud y te comprometes en la lucha por un mundo mejor y pasan los años y te vez transformado en una paja como yo, y te miras en el espejo y llegas a la conclusión que no traicionaste tus sueños, que tuviste el coraje de vivir, que le diste una causa a la vida y eso te hace querer doblemente la vida“
Con esas palabras reconocemos que en Colombia existen millones de personas que aman la vida, que la dedican a propuestas colectivas cuyas banderas son condiciones dignas para el pueblo colombiano, como la vivienda digna. Por ello vale la pena como Revista Hekatombe (en tanto medio contra- informativo) no solo denunciar lo ocurrido sino saludar al Movimiento Dieciocho de Diciembre en estos dos años resistencia y lucha por la dignidad.
Cabe resaltar que en este texto no pretendemos ser amarillistas, ni victimizar a las personas. Es pertinente resaltar que bajo ninguna circunstancia se debe encontrar negocio en el dolor humano, no existe un acto más reprochable que aprovechar la necesidad del otro para sacar beneficio. Tampoco es solo por el caso de esta mujer y la denuncia alternativa que ha tenido el caso, es resaltarlo porque reconocemos que como esta familia miles de personas se encuentran en el mismo riesgo a quedarse sin vivienda y también es un llamado a organizarse como enseñanza que ha dejado la experiencia del Movimiento 18 de Diciembre.
Bueno y ¿qué ocurrió el 18 de diciembre?
En la localidad de Suba como es conocido se ubica la mayoría de la población capitalina, según el DANE cuenta con 1´174.763 habitantes, allí vive doña Nohora Moreno una madre cabeza de hogar que ha combatido incluso contra la misma muerte, y no es exageración, ella, como es habitual en los barrios populares a quienes nos parece muy caro la forma de vida de ciudad, donde el salario no cobija todas las necesidades, mucho menos si hablamos de los docentes como es el caso de esta mujer, profesión pormenorizada hoy por hoy en la sociedad, -profesión que como lo señala Renán Vega, se ha transformado de una proletarización a una pobretalización-, ella como cualquier otro habitante con esas necesidades solicitó dinero a un prestamista en el año 1996, que cobraba, según doña Nohora de 5 a 6 % de intereses de usura.
Sumado a todas las adversidades que presenta la vida diaria, esta mujer se entera que sufre de cáncer teniendo que hacerse una serie de tratamientos, dejando así de pagar los intereses, por lo cual la vivienda fue rematada a un nuevo comprador, para comprender mejor lo sucedido véase la entrevista realizada por el Noticiero Barrio Adentro en: https://www.youtube.com/watch?v=FXnwTLX7C_I
Es así como el 18 de Diciembre del 2013 el encabezado de todos los noticieros reportaban un violento desalojo en la localidad de Suba, ese día desde las 8 a.m. se realizó un intento de desalojo cuya resistencia de la familia y vecinos impidió desocupar el inmueble. La brutalidad policial que se ejerció ese día no tuvo en cuenta a niños y adultos mayores que se encontraban en la casa disparando gases lacrimógenos y enviando oficiales de civil a atacar la vivienda con piedras. Agresiones que no pudieron ser ocultadas, vale la pena revisar la emisión presentada por Noticias RCN: https://www.youtube.com/watch?v=VjjmzTHB2u0
¿Y desde entonces qué ha pasado?
Desde ese entonces no paraban de llegar nuevas fechas para hacer efectivo el desalojo, pero los vecinos y los habitantes de la casa se organizaron en el llamado Movimiento 18 de Diciembre, espacio que logra incidir en las necesidades de niños, jóvenes y adultos de la localidad a través de actividades culturales, sumado a una fuerte formación académica sobre los límites en el uso de la fuerza pública y el derecho a la vivienda digna.
Ninguno de los intentos de desalojos fueron efectivos hasta este año, el 16 de julio del 2015 después de tantas amenazas de desocupar el inmueble llegó la fuerza pública y atacó brutalmente contra diez personas que se encontraban en la vivienda, quienes fueron retenidos y llevados a la estación de Paloquemao, donde coincidencialmente se encontraban también los 13 compañeros injustamente detenidos del Congreso de los Pueblos.
Para ver la brutalidad policial que se ejerció el 16 de Julio véase Noticias de City tv: https://www.youtube.com/watch?v=e6IipZMWCGI
En la fotografía se ve a doña Nohora Moreno en los juzgados de Paloquemao exigiendo la libertad de su hijo y familiares.
Al día siguiente del violento desalojo se realizó un plantón conjunto entre las plataformas políticas Congreso de los Pueblos y la Marcha Patriótica en la estación de Paloquemao, espacio que fue acompañado por varias organizaciones sociales, representantes políticos y algunos que intentaban hacer campaña política en pleno período electoral caso por ejemplo del distinguido Hollman Morris.
En ese espacio dejaron en libertad a las diez personas que fueron capturadas, a quienes los golpes de la brutalidad policial no acalló, por el contrario fortaleció la convicción de estos viviendistas que sin propiedad sabían mejor que muchos lo que implica tener dignidad, como diría aquella consigna:
“Que nos arrebataron tanto que terminaron quitándonos el miedo”
Pero si existe algo que jamás podrán quitarnos a todas las personas a las que ha atropellado tanto el Estado, es la esperanza de poder transformar y cambiar este mundo donde importa más la propiedad que la vida y bien de las personas. Para ver las palabras del hijo de Doña Nohora Moreno al salir de la Estación véase: https://www.youtube.com/watch?v=0d7wL4W9USs
Posterior a toda esta brutalidad el Movimiento 18 de Diciembre lanzó a esta mujer como edil, quien obtuvo cerca de 1500 votos, un número significativo pero lastimosamente no el necesario para la representación, a la fecha se encuentran trabajando en diferentes redes de viviendistas quienes corren el riesgo a ser desalojados. No se trata tan sólo de evidenciar el caso que pareciera un cuento de hadas con final feliz, porque reconocemos que hasta ahora se abre las puertas a un espacio amplio que defienda la vivienda digna como alternativa de paz.